Aquí los dejo con este recorrido por algunos puntos de la capital cubana donde, hasta hace un par de semanas, existían vallas que recordaban la hostilidad entre Cuba y Estados Unidos (es decir, entre el gobierno de Castro y Estados Unidos), o lo fuerte que era el «David» revolucionario ante ese Goliat narizón y enfermo. Bueno, pues todo ha desaparecido. ¡Nada como una «simple» embajada para redecorar una ciudad! 😉
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