Llevo varios meses intentando escribir un texto que quiero titular Dialectos. Hasta ahora lo único que tengo claro es que en la noción de «dialecto» se resume una circunstancia local con una condición marginal. Y que esos dos factores exigen una apreciación desde su carácter básicamente lingüístico. Leyendo el ensayo de Orlando Hernández he llegado a la conclusión de que, salvando sus especificidades, es un discurso en defensa de los dialectos. Para seguir leyendo…
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