Un deshielo profundo de mitos congelados desde hace 57 años. Carne de prensa diaria, en esos hechos laten los materiales con los que nuestro país no se había atrevido casi nunca: el cotilleo, la alfombra roja de las celebridades, la bulimia como estilo de vida, la testosterona de nuestros intelectuales, el mercado y las mafias del arte, etc. En uno de sus momentos más paradójicos, el presente de Cuba puede ser relatado como una teleserie llena de secretismo, apretones de manos, altas dosis de spanglish,personajes aparecidos y salidos de escena sin justificación, y, fundamentalmente, corrupción. Para seguir leyendo…
Responder