Angel Santiesteban: ·El oportunismo de los escritores cubanos·

Actualidades | DD.HH. | 26 de enero de 2018

Se cuenta que Stalin, para probar la fidelidad que cada miembro de las repúblicas soviéticas le dedicaba, desplumó alguna vez a un ave a la que lanzó al aire nevado; la pobrecita no tuvo como mantenerse en el helado vacío y cayó al suelo, justo a los pies del dictador, quien no dudo en usar la vuelta de la desplumada y friolenta criatura a su favor. Si aquel animal alado volvía con él, buscando el calor que precisaba, entonces él no era tan malo. Y eso es lo que debían hacer todos, volver a los pies de Stalin. Para seguir leyendo…