Es morboso y seductor el cliché de decir que este es un libro-testimonio, un libro-arte que se burla del espíritu moralizante que conlleva el martillo de cualquier censura. Pero no importa, ahí podrán ver incluso el Acta de libertad del artista —como si no fuera esa la primera paradoja, hablando de encierros y libertades. Aquí están todos «los papeles del tanque», una memoria revivida por ese prisionero político que fue el pintor, escultor y artista del performance Ángel Delgado en una cárcel cubana. Para seguir leyendo…
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