Vanessa García-Osuna: ·Interviú a Carmen Herrera·

Artes visuales | Memoria | 11 de abril de 2019

Barnett Newman y Wifredo Lam fueron grandes amigos míos. Con Barney y Ana Lee, su esposa, nos reuníamos muy frecuentemente. Al principio mis conocimientos de inglés eran rudimentarios y apenas podía participar en las conversaciones, solo entendía frases sueltas, pero poco a poco fui entendiendo más. Barney era un auténtico intelectual. Una persona tremendamente culta y brillante. Recuerdo que una vez se sentía decaído, deprimido, algo pesimista, y anunció que iba a solicitar trabajo como maestro de escuela. Ana Lee se indignó y le espetó…”yo me casé con un pintor, no con un maestro, y si cambias de profesión ¡me marcho!”. Su mujer le apoyaba y le protegía muchísimo. Fue una figura fundamental para su carrera. Wifredo tenía algo de Don Juan y estaba muy solicitado por las chicas, que lo consideraban muy exótico. Cuando él estaba por Nueva York mi teléfono no paraba de sonar… «¿Está Wifredo en la ciudad?» ¡todas le buscaban!. También me utilizaba de “transporte”. Para seguir leyendo…