Considerar Los Siervos solamente como una obra anticomunista o incluso antitotalitaria es reducir buena parte de su sentido. Ciertamente una de las líneas maestras de la obra parte del cuestionamiento del comunismo como proyecto de emancipación. La conversión de Nikita en siervo no sólo contradice la anulación absoluta de toda explotación sino que delata su encubierta persistencia en el nuevo régimen. No obstante la obra intenta algo más que exponer los contrasentidos del comunismo. Con Los Siervos Piñera enjuicia el comunismo desde el sentido común liberal según el cuál la explotación y el deseo de dominio son consustanciales a la condición humana.
Responder