Angel Alonso ·Homenaje a Pedro Álvarez·

Artes visuales | 21 de noviembre de 2017

De aquella temprana exposición de Calzada y 8 el cuadro que más conmovió a algunos de sus colegas fue aquel donde asomaba un camión de policía aplastando una rosa. Digo algunos, porque la mayoría tildaron la exposición de conservadora y no desentrañaron la perspicacia de aquellos paisajes. Se trataba de un momento histórico en el que el paisaje estaba proscrito, tuviese la intención que tuviese, y que la pintura de caballete en general se consideraba erróneamente un atraso ante la avalancha de instalaciones que poblaban las galerías. Pedro, ante las diatribas, salió de la galería con los ojos mojados por su sensibilidad pero, osadamente convencido de lo que estaba forjando, repetía Yo pinto lo que yo siento, yo pinto lo que yo siento como si su máxima fuese un mantra, tropical y emotivo. Para seguir leyendo…