Ángel Pérez: ·Estética audiovisual y cambio de siglo (cine cubano, 1990-2020)·

Actualidades | Cine | Memoria | 24 de agosto de 2020

Si otrora en Cuba era visible un cine abierto a la Historia, enfocado en participar de la construcción del mundo, ahora los cineastas han asumido la postura de enunciar el afuera, de objetivar lo real, como un modo de revisión del sujeto en tanto individualidad singular. En lo que Tomás Gutiérrez Alea, Sara Gómez, Julio García Espinosa o Nicolás Guillén Landrián participaban de la escritura de la Historia desde la representación, ahora la representación tiende a la búsqueda de una verdad del sujeto y la Historia que posibilite la inteligibilidad del yo del ser. Cada película deviene un pasaje puntual de subjetividades inscritas en una multiplicidad de conflictos existenciales. La realidad estructurada en los filmes es postulada desde una identidad que se experimenta a sí misma sujeta al afuera que esa realidad representa. El mundo en tanto materia de creación constituye una forma de subjetivación que permite al yo —no importa el modo en que este se trasparente— ser y reconocerse solo en la medida en que es en ese mundo discursivo. Para seguir leyendo…