Resulta (…) falso que las alianzas geopolíticas desnaturalicen tour court las agendas propias. Como he dicho antes, si aplicamos una lógica normativa, demócratas como Mandela o Walesa estarían descalificados por sus alianzas respectivas con Fidel Castro y Ronald Reagan, en plena Guerra Fría. Pero sus prioridades eran otras: liberarse del opresor concreto en su circunstancia concreta. El Congreso Nacional Africano o Solidarnosc, una vez victoriosos, no convirtió el castrismo o el neoconservadurismo en ideologías de Estado de las nacientes democracias de Polonia o Sudáfrica. Simplemente, se apoyaron en quien les ayudó. Para seguir leyendo…
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