Damaris Betancourt: Sombras de hormigón
La Habana se deshace, se va desvaneciendo como un castillo de arena expuesto a un vendaval. Harta de la indiferencia y agotada de sí misma, se desprende de sus edificios, de sus avenidas; y también de sus habitantes, que cada vez más huyen despavoridamente de ella, como polizones en un navío que pronto tocará fondo. Para acceder a la galería…
Sombras de hormigón, muy cierto Damaris, muy cierto…pienso que cuba deberia exportar como un renglón para la adquisición de divisas, escombros, escombros, que en eso si,son campeones en producir…saludos y gracias por compartir este artículo