Alina Sardiñas: Los cielos abiertos / Testimonio de una violación

DD.HH. | 19 de abril de 2023
©Mental health

La baba en mi cuello seguía allí, seca. Ya había pasado todo (o al menos eso pensaba) podía ocuparme de ella. Le pedí a mi papá su pañuelo que siempre olía a colonia y me fui al baño. La hediondez del baño era lo que esperaba y por supuesto no había agua. El tanque del inodoro no tenía tapa y yo tenía la esperanza de encontrar, aunque fuera un rastro de agua en aquel desierto de dunas de magnesio. Empecé a frotarme el cuello con la punta del pañuelo, algunas partículas de calcio se habían adherido a él y me arañaban. Como si quisiera borrarme el cuello, como si el pañuelo fuera una goma de borrar capaz de irme desapareciendo, me frotaba cada vez con más violencia. Recuerdo el asco. Para seguir leyendo…